
No sé, no sé. Todavia no tengo la lista completa de los "objetos materiales e inmateriales" que el gobierno te obliga a pagar, pero que te cobren $25.- por un D.N.I (Pedazo de papel inservible, en el que supuestamente ahí está guardada tu persona, tu escencia, tu alma, y hasta quién te dice, tu destino) no tiene nombre [O sí lo tiene: Y se llama A F A N O].
O sea, ¿tengo que poner dinero para que me otorgen un nombre y un apellido? ¿Tengo que pagar por mi propia IDENTIDAD? En ese caso, prefiero que me conozcan como "La de los pelos locos", "La bruja esa", "Che", "Ey, vó'... Si, si: Vo'!" o diversos nombres; si al fin y al cabo, mis padres, tús padres o los de cualquiera, se mataron poniendote un nombre para que después te digan "Ey, vo, veni acá" -No, no pienso ir porque, que yo sepa en mi DNI me llamo Lorena y no "Vo" ¿Entendistes?-.
Y bueno, cerrado este paréntesis, no sólamente te cobran por TÚ NOMBRE, sino que tambien TE OBLIGAN A PAGARLO.
Cambiando de tema, pero siempre caminando sobre esa fina linea que separa la cordura del delirio (Aunque admito que es como un suave y placentero tambaleo), también estuve leyendo que el Honorable Gobernador de la Ciudad de Buenos Aires, quiere poner un impuesto a la basura de restaurantes y hoteles, así como también a los escombros de las construcciones que se realicen.
Okey, el día que pongan un impuesto al "Uso de los Blogs" avísenme, así lo cierro y no escribo más.
Y, con esto, me despido de todos ustedes, mis ávidos lectores.
Hasta la próxima entrega.
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